Muchas familias desplazadas por el huracán María tienen grandes dificultades para su nuevo comienzo y piden que se modifiquen requerimientos para viviendas o podrían enfrentar desalojo en solo una semana por falta de recursos.
A pesar de esfuerzos para su transición en la Florida, Ariana Colón con su bebé de un año de edad, dice que ha encontrado dificultades para conseguir un empleo que le ofrezca suficiente ingreso y así obtener una vivienda y cuidar su hijo.
Unas 1720 personas que componen más de 600 familias tienen los días contados bajo un techo ya que la agencia federal de emergencia FEMA, cesará de extender auxilio monetario el 30 de Julio.
Algunos han logrado vencer obstáculos y abogan por los que quedan atrás.
Las manifestaciones continuarán durante esta semana hasta tanto sean escuchados, dijeron organizadores y afectados por el fin de la asistencia.
