ORLANDO, Florida. – Los nuevos miembros de la junta del Distrito de Supervisión de Turismo de Florida Central, designados por el gobernador de Florida, Ron DeSantis, se enfrentan a nuevos desafíos legales contra la compañía Disney.
Antes de entregar oficialmente el Distrito de Mejoramiento Reedy Creek a los nuevos integrantes, la compañía Disney presuntamente obtuvo otros beneficios bajo la mesa por parte de la pasado junta que ahora dejan casi sin poder a los nuevos directivos nombrados por el gobernador.
La situación pronostica una nueva batalla legal que pudiera llegar a la Corte Suprema de Estados Unidos.
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Martín García, presidente del Distrito, dijo que “nos enfrentaremos a un monstruo económico con su poderío legal” al dar a conocer el nuevo reto.
Específicamente, la anterior junta aprobó un acuerdo de desarrollador en el que le otorga amplios poderes a Disney sobre el territorio donde operan los parques temáticos por los próximos 30 años y prohíben cambiar los términos a los nuevos integrantes nombrados por DeSantis.
Daniel Langley, asesor legal, explicó que “sí como junta queremos pintar o realizar algún pago administrativo, debemos pedirle permiso a Disney”.
Por lo pronto, esperan que Disney se comunique con los abogados para llegar a “una solución colaborativa”.
Los acuerdos de la anterior junta también incluyen la construcción de otro parque temático y otros parques pequeños, que no admiten cambios sin obtener la aprobación de Disney.
“Estos acuerdos son inusuales y sospechosos, fueron aprobados en los últimos meses como una póliza de seguro para Disney”, dijo Langley.
Por su parte, Disney dijo en declaraciones escritas que “todos los acuerdos firmados entre Disney y el distrito fueron apropiados, y se discutieron y aprobaron en foros públicos abiertos y notificados de conformidad con la Ley Sunshine del Gobierno de Florida”.
Aún así, Langley dijo: “Definitivamente esos acuerdos son ilegales y no deberían haberse permitido porque carecen de interés público”.
En la sesión de este miércoles, la nueva junta aprobó contratar firmas de abogados para impugnar los acuerdos que blindaron a Disney.
Además, buscarán un nuevo administrador porque el actual formó parte de la anterior directiva.
“Necesitaremos abogados que históricamente hallan representado al estado de florida, iremos hasta el final en esta nueva batalla legal”, dijo García.
El gobernador decidió tomar el control estatal del antiguo distrito Reedy Creek en manos de Disney desde 1967 luego que la compañía se opusiera a la legislación conocida como “No digas gay”.
