OCALA, Florida. – Susan Lorincz, la sospechosa de haber disparado y matado a su Ajike “AJ” Owens en Ocala obtuvo una fianza de en $150,000 por el cargo de homicidio involuntario y otra de $4,000 por los otros cargos de los que fue acusada.
La defensa de la víctima esperaba que el juez le impusiera una fianza de hasta $200,000.
Lorincz fue arrestada y acusada el pasado miércoles por las autoridades del condado Marion.
En la declaración jurada de Lorincz, la sospechosa dijo que el arma que usó para dispararle a “AJ” Owens la compró después de haber tenido una discusión con la víctima.
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Asimismo, confesó que antes de matar a la mujer negra, de 35 años y madre de 4 hijos, insultó a los menores con la palabra N.
Según las autoridades, la evidencia recopilada durante la investigación estableció que Lorincz se encontraba molesta con los hijos de “AJ” Owens por jugar en un terreno cercano a su casa.
El 2 de junio, Lorincz discutió con los niños. Durante esta discusión, Lorincz le arrojó un patín al hijo de 10 años de Owens y lo golpeó en el dedo del pie.
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Cuando el niño y su hermano, de 12 años, fueron a hablar con Lorincz, ella abrió la puerta y les golpeó con un paraguas.
Los niños le contaron a su madre lo que había sucedido, por lo que Owens se acercó a la casa de Lorincz, llamó a la puerta varias veces y le exigió que saliera.
Lorincz no salió, pero le disparó a través de la puerta, golpeando a Owens en la parte superior del pecho. En el momento en que le disparó, el hijo de 10 años de Owens estaba presente.
Cuando fue entrevistada, Lorincz dijo que actuó en defensa propia y que Owens había estado tratando de derribar su puerta antes de que ella disparara su arma de fuego.
Lorincz también afirmó que Owens la había perseguido en el pasado y la había atacado previamente.
A través de su investigación, los detectives pudieron establecer que las acciones de Lorincz no eran justificables según la ley de Florida.
Lorincz fue arrestada por homicidio involuntario con un arma de fuego, un delito grave de primer grado punible con 30 años de prisión, así como negligencia culposa, agresión y dos cargos de agresión.
