No dejes pasar tu examen físico anual

El siguiente contenido ha sido creado en colaboración con Orlando Health. Este contenido no representa las opiniones del equipo editorial de Telemundo Orlando. Haz clic aquí para conocer más sobre Orlando Health.

Nuestras vidas suelen estar tan ocupadas que es fácil olvidar programar un examen físico anual. Si no sufres de ninguna condición, quizá hasta te preguntes si es realmente necesario. Pero esa es una manera de pensar peligrosa. Los chequeos regulares con tu médico son cruciales para prevenir y detectar enfermedades crónicas a tiempo.

Atrás quedaron los días en que sólo acudías al médico si estabas enfermo o tenías una enfermedad crónica. Los chequeos regulares (también conocidos como "medicina preventiva”) te brindan a ti y a tu médico la oportunidad de evaluar tus hábitos de estilo de vida, analizar cualquier inquietud que tengas y diseñar un plan para mantenerte saludable.

Beneficios de los chequeos regulares

Incluso si crees estar sano, asistir a un chequeo regular nunca será una pérdida de tiempo. Estos ofrecen varios beneficios, que incluyen:

• Detección temprana: Los chequeos regulares pueden identificar algún problema de salud temprano, aumentando las probabilidades de un tratamiento exitoso y reduciendo posibles secuelas. Estos chequeos pueden ayudar a tu médico a prevenir, detectar y tratar enfermedades como la anemia, artritis, diabetes, depresión, hipertensión y obesidad.
• Vigilancia de condiciones existentes: Tus doctores pueden encontrar factores de riesgo en tus condiciones de salud actuales. El tratamiento y seguimiento frecuentes ayuda a reducir el riesgo de complicaciones y empeoramiento de los síntomas.
• Aprender nuevos hábitos positivos: Existen ciertos cambios en tu estilo de vida que pueden reducir tu riesgo a ciertas enfermedades, como comer una dieta balanceada, ejercitarse seguido, entre otros.
• Estar al día con las pruebas de detección y las vacunas: Estar al día con tu salud no sólo ayuda a minimizar riesgos, sino que también fortalece tu sistema inmunológico.
• Desarrollar y mantener una relación positiva con tu médico de cuidado primario: Es clave acudir a un médico con el que te sientas cómodo. Es importante que exista confianza para poder contarle posibles preocupaciones, y/o quitarte cualquier duda. No olvides que tus médicos están para ayudarte.

¿Qué tan seguido debes hacerlo?

Tu edad y estado de salud determinarán con qué frecuencia debes realizarte las pruebas de rutina. Si bien la frecuencia depende de ti y tu médico, las recomendaciones generalmente son:

• Una vez al año si tienes menos de 50 años y gozas de buena salud.
• Dos veces al año si tienes 50 años o más.
• De tres a cuatro veces al año si tienes una enfermedad crónica, como la diabetes.

Tu médico puede recomendar más o menos tiempo entre visitas según tu estado de salud, los resultados de las pruebas de detección y los factores de riesgo para desarrollar enfermedades crónicas.

Qué esperar

Ten en cuenta que los chequeos regulares son una oportunidad para conocer a tu médico y establecer una relación positiva. Esto ayuda que tu médico comprenda tu estilo de vida y así  pueda identificar cualquier factor de riesgo para ciertas condiciones de salud o detectar temprano posibles condiciones .

Los exámenes físicos regulares para adultos generalmente incluyen:

• Revisión de historial de salud personal y familiar
• Control de la presión arterial
• Examen de cuerpo completo
• Discusión sobre salud mental para detectar depresión, ansiedad y otras condiciones
• Pruebas de laboratorio como un panel de sangre y hemograma completo
• Vacunas/refuerzos requeridos
• Una revisión de los medicamentos que estás tomando

Tu médico también preguntará sobre tu consumo de alcohol y tabaco, ya que son factores de riesgo para muchas enfermedades. También podría programar pruebas de detección para vigilar más de cerca alguna condición que le preocupe a causa de ciertos factores de riesgo o antecedentes familiares.

Cómo prepararte

Para muchos, una visita al médico puede provocar nervios o estrés. Sin embargo, estar preparado no sólo ayudará estar más tranquilo, sino que también hará que aproveches tu visita al máximo. Algunas cosas que puedes hacer para prepararte incluyen:

• Haz una lista: Tener escritos todos los temas que quieres discutir con tu médico te ayudará al saber que no olvidarás nada. Esto podría incluir actualizaciones sobre tu salud desde la última visita, efectos secundarios de cualquier medicamento que estés tomando, o cualquier inquietud que tengas respecto a tu salud.
• Pídele a un familiar o amigo que te acompañe: Tu persona de apoyo puede ayudarte a recordar lo que se discutió en la cita y puede tomar notas de la conversación. Si el familiar o amigo no puede asistir en persona, pregúntale a tu médico si puede hacerlo virtualmente.
• Lleva una lista de los medicamentos que estás tomando actualmente: Incluye vitaminas, medicamentos de venta libre, suplementos dietéticos y remedios a base de hierbas que estés usando. El doctor puede pedir tus medicamentos durante la cita, así que de no poder llevarlos, asegúrate de tomarles una foto.
•  Pregunta por acomodos especiales: Llama al consultorio de tu médico con anticipación si tienes alguna solicitud de acomodos especiales, como un intérprete, o si necesitas una silla de ruedas a tu llegada.
• Sé honesto con tu médico: La comunicación abierta con tu médico es importante, sobre todo cuando se trata de temas que pueden resultar incómodos, como la depresión, los problemas sexuales y/o el consumo de drogas. Ser franco con tu médico lo ayudará a brindarte la mejor atención posible.

Si es tu primera cita con un nuevo médico, asegúrate de llevar tus registros médicos anteriores, incluido el historial de vacunación, el historial de salud familiar y los resultados de pruebas de detección anteriores.

Orlando Health Medical Group te brinda servicios integrados de cuidado de salud primario y especializado que se adaptan a tus necesidades. Para obtener más información sobre nuestros médicos y facilidades de hospitales visita https://www.orlandohealth.com/cuida-tu-salud